martes, 15 de febrero de 2011

Lo dijo Kant


Hoy quiero compartir algo que aprendí hace un tiempo. Lo compartió con nosotros mi mamá y fue motivo de algunas charlas e intercambios y la verdad que sirve. Me puse a hacer el ejercicio, primero viendo a los demás proceder y después, la parte más dificil, haciendo un análisis personal y llegué a la conclusión que siempre tengo cosas para mejorar.

Investigando en Wikipedia encontré que: el famoso "Imperativo Categórico de Kant" o "Imperativo Kantiano" pretende ser una especie de mandamiento autónomo y autosuficiente, capaz de regir el comportamiento humano en todas sus manifestaciones. Tiene una serie de fórmulas, entre las que la más conocida -y la que me comentó mi mamá-, es la siguiente:

"Obra sólo como si la máxima de tu acción fuera a tornarse por tu voluntad en ley universal".

Yo soy partidaria, o en otras palabras me gusta, hablar en fácil. A menudo tengo la sensación, aunque pueda llegar a ser errada según el contexto en que se genere, que cuando alguien habla en "dificil" busca impresionar en lugar de informar o enseñar. (sin menospreciar el mensaje final que puede ser, como en el caso de Kant, sumamente útil).

Así que en términos "fáciles", mi mamá me tradujo esta sentencia en una simple oración que me resultó mucho más sencilla de asimilar. He aquí:  "¿Si todo el mundo estuviera haciendo lo que yo hago en este momento, el mundo sería un lugar mejor"?

Da para pensar, no?

Observé con otros ojos, robos, delitos, revoluciones, estafas, violaciones, piquetes, revueltas, mentiras, enfrentamientos, guerras y podría seguir enumerando. Si lo que hacen estas personas lo hiciera absolutamente todo el mundo al mismo tiempo, no hay dudas que sería un caos total.

Por otra parte, también observé con otros ojos a la gente que ayuda en forma desinteresada, a las madres que crian a sus hijos con amor, con disciplina, con límites, con respeto. Cómo sería el mundo si todos hiciéramos lo que la Madre Teresa de Calcula, por citar un ejemplo? No hay dudas tampoco en este caso que sería un lugar mejor.

Ahora bien, estos juicios no dejan de ser algo absolutistas, un juego de blancos y negros y nosotros bien sabemos que en la vida hay muchas tonalidades de grises, que no todos hacemos lo mismo al mismo tiempo ni por las mismas razones y que somos capaces de actos heróicos pero también de las más viles bajezas.

Por ende, aunque este razonamiento resulte algo falible lo adopto sí para mi propia vida. No puedo cambiar al mundo pero sí a mí misma, y tal vez con mi ejemplo, a quienes me rodean, no obligándolos, sino ayudándolos a ejercer sabiamente su albedrío.
Después de todo yo trato de aplicar la conocida regla de oro y hago con los demás lo que me gustaria que hicieran conmigo.

Cariños.

8 comentarios:

El Gaucho Santillán dijo...

El mundo debe funcionar para todos.

Los buenos, los malos, los inteligentes y los tontos.

Es como el Arca de Noè, creo yo.

Un abrazo.

Mai dijo...

Viste, sin saberlo, eras una Princesa Kantiana!

Me encantò la sìntesis del gaucho: El mundo es como el Arca de Noé!

Besos Princess

Lolita y El Profesor dijo...

Princesa:
Tenga en cuenta lo difícil que debe haberle resultado a Kant -en esa época, y siendo alemán-, el descular ese "imperativo categórico".
Por otro lado, creo que lo mejor que hizo fue diferenciar el "debo", del "puedo", del "quiero" y, de esa manera, sentar el basamento del derecho positivo.
Piense que antes el derecho -la ley-, era divino ("¡Ya vas a ver cuando te agarre Dios!"), o natural ("Todo vuelve, todo vuelve... vas a ver cómo la vida te las cobra...").
Respecto de lo que menciona de los que "hablan difícil", ¿sabe qué creo? Que sólo los que tienen sus conocimientos muy firmes y seguros, los explican fácil, de manera que hasta los conceptos más difíciles de asir, los pueda comprender un niño.
Ejemplo: la síntesis del gaucho, como menciona Mai, más arriba.

Un saludito,

El Profesor

Anavril dijo...

No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti.

Así vivo yo desde chiquitita....a veces me da bronca ser tan buenuda (como decia mi viejo)...

Por lo menos ésa es mi intención...supongo que me sale en un ...95%?

María Beatriz dijo...

Así somos los seres humanos. Una mezcolanza de "virtudes y defectos"...Quién puede juzgar el corazón de un ser humano, así sea el peor de los asesinos?
Creo que el camino, más que "cambiar" uno mismo, me parece que va por "aceptarse" a uno mismo...

Me encantó tu post!
Un beso

A.C. dijo...

Qué buena esa frase, verdad? Te inspira a creer que la gente no es tan mala, pero después de viajar enlatada en el subte alguna vez creo que descreo de toda bondad humana. Voy a intentar desde lo individual ahcer algo por el mundo, al menos por mi mundo.
Quiero darte las gracias por tus últimas palabras en mi post y espero poder en algún momento sentir como vos que hice negocio ja

Princesa Adora dijo...

Gaucho, Ud. sí que la tiene clara!

Mai,igual me quedo con "PRINCESA ADORA" en lugar de PRINCESA KANTIANA, jajaja!!!

Profe, tengo algo de experiencia enseñando a niños y se ve que me habrá quedado el defecto cuasi profesional de hablar en "fácil" para que entiendan todos. Igual soy mujer, las pocas palabras no son para mí!! Jajaja.


Anavril, mejor buenuda que otra cosa!

María Beatriz,para mi la aceptación es el comienzo del cambio. De lo que acepto soy a lo que deseo ser.

AC. hacé la prueba y vas a ver como cambia todo para mejor. Hay gente mala pero hay más buena,sólo que, como digo siempre los buenos no hacen tanto ruido, no salen en la tele, no tienen rating, pero que están están!!

Cariños y gracias a todos por comentar!!!

Fabiana dijo...

La verdad que me enrosqué un poco con toda la explicación. La conclusión es muy sencilla y digna de ser respetada.

Mi premisa siempre fue tu último párrafo, pero al revés. Cuando estoy por tomar alguna decisión que afecta a un tercero, inmediatamente me pongo en el lugar del tercero y pienso si me sentiría cómoda.

Tampoco es muy complicado y así podemos convivir mejor entre todos.

Besos.